Nudos


Los nudos pueden producirse por varios motivos, pero sobre todo al no bañar y secar bien a nuestro perro le provocamos, sin saberlo, unos nudos que le perjudican a la salud.

Los nudos apretados tiran de la piel e impiden la correcta circulación de la sangre. Al tirar de la piel pueden aparecer rojeces debido a que la piel se rompe. Si ese nudo ha estado mucho tiempo y se ha mojado y no se ha secado bien, la humedad y la suciedad provoca dermatitis. Además, cuando liberamos la piel de ese nudo la sangre vuelve a circular de forma normal, pero lo hace como una explosión. El ejemplo que podemos poner es una goma elástica, que si la estiramos, al soltar de un extremo la goma sale disparada; pues la sangre comienza a circular de esa manera. Esa explosión de sangre puede provocar inflamación, moratones, incluso sangrado en zonas muy irrigadas como las orejas, porque muchos vasos no soportan ese torrente repentino y se rompen.

Nudos y alergia

Cuando un perro tiene muchos nudos y la piel se queda irritada y sensible, es posible que ese día incluso el cosmético más suave le produzca una reacción.

Los picores casi siempre son el producto de nudos e irritaciones. Hay que tener mucho cuidado porque con el rascado continuo y el lamido se pueden hacer heridas muy feas y quedarse en carne viva. Por estas razones, las heridas que puedan salir al cabo de los días no tienen porqué haber sido responsabilidad del peluquero. Normalmente, el peluquero debe avisar de las afecciones que vea en el perro y de los cuidados que debe tener respecto al lamido y rascado. Sin embargo, hay veces que las rojeces aparecen después de la peluquería y el peluquero no comenta nada al propietario porque no es algo que haya visto durante la sesión. También influye mucho el estado inmune del perrito: si se encuentra en un momento inmunológicamente bajo de defensas pueden producirse rojeces, bien por quitar un simple enredón, reacción alérgica a la cosmética o simplemente esa zona está más sensible por otros motivos. En este caso, es algo que los peluqueros no podemos adivinar.

Inflamación

Hay que tener en cuenta que los nudos pueden producir una inflamación y el exceso de suciedad puede provocar varias reacciones:

  • Irritación y dermatitis. El cúmulo de porquería no deja transpirar la piel además de favorecer la proliferación de bacterias.
  • Inflamación. Cuando se acumula suciedad de meses en cavidades como por ejemplo un pezón invertido, esta misma suciedad actúa como un nudo tirante: la suciedad estrangula el pezón y cuando se libera de esa porquería la explosión provoca hinchazón al cabo de las horas. Lo mismo puede ocurrir en los espacios entre almohadillas o deditos.